La entrega de pedidos de Uber Eats en Tokio pronto será manejada por robots totalmente autónomos.

Los robots en Tokio pronto estarán tomando pedidos de comida para Uber Eats.
Entrega a través de Uber
Uber Eats se está preparando para introducir su flota de robots de entrega sin conductor en Tokio mediante una colaboración con Mitsubishi Electric y Cartken, una firma de robótica autónoma. Después de su lanzamiento en los Estados Unidos, este es un gran avance para el desarrollo internacional de Uber Eats.
Además de mejorar la eficiencia y conveniencia de los servicios de entrega de alimentos, el programa de Uber Eats tiene como objetivo abordar la escasez local de mano de obra. La entrega autónoma complementará los métodos de entrega actuales que utilizan trabajadores humanos, bicicletas, motocicletas y a pie, según Shintaro Nakagawa, CEO de Uber Eats Japón.
Robot que puede conducirse solo para cumplir pedidos de Uber Eats en Tokio
Los robots de entrega Modelo C de Cartken estarán equipados con seis cámaras para la conducción autónoma y detección de obstáculos, así como una potente inteligencia artificial. Las máquinas fueron ajustadas para que puedan cumplir con las normas japonesas, que incluyen un límite de velocidad máximo de 5.4 km/h y una menor capacidad de carga, para que puedan hacer entregas y circular por Tokio.
Mitsubishi Electric se ha unido a Uber Eats y Cartken para gestionar las operaciones y colaborar en la expansión del proyecto.
Una de las precauciones de privacidad implementadas por Uber Eats fue el enmascaramiento automático de los rostros humanos en las fotografías capturadas por los robots.
La entrega con robots es una respuesta práctica al problema logístico que se acerca, según Shoji Tanaka, director general senior del centro de investigación de aplicaciones avanzadas de Mitsubishi Electric.
Estamos cruzando los dedos para que este programa recién anunciado anime a más negocios de entrega robótica a surgir en todo Japón.
Los horarios de apertura y los restaurantes participantes son algunos de los detalles de lanzamiento que no se han revelado aún.
Existen obstáculos, como las zonas densamente pobladas, donde los robots deben maniobrar entre personas, a pesar del optimismo de las empresas participantes.